8.11.2005

Mi socio Jack


Voy con el carrito del supermercado y observo que el whisky bourbon Jack Daniels está en oferta. Compro una botella y agrego otra de amaretto, para enseñarle a mi amiga santiaguina cómo se bebe en Valparaíso.

Este trago de exquisito color dorado, símbolo de los rockeros más duros, lo he tomado en muy pocas ocasiones y siempre trato de reservarlo para momentos extraordinarios o carretes que trascenderán en el tiempo y en el espacio.

Después de almorzar unos tutos cortos de pollo asados con salsa mexicana, con su respectivo vino tinto, comenzamos el ritual de abrir la botella de etiqueta negra y empezar a bajarla lenta y aromáticamente.

Un llamado de teléfono me avisó que el grupo de rock Zurdaka estaba a punto de llegar a mi casa. Durante un microsegundo se me ocurrió esconder el Jack Daniels, sin embargo, rápidamente me convencí de que la actitud, además de ordinaria, estaba revestida del egoísmo etílico.

Los muchachos del grupo Zurdaka habían llegado hace algunos días a Valparaíso desde Concepción. Tocaron en Quilpué y sólo les quedaba el último día de carrete. El más famoso del grupo, Feliciano, que apareció en el reality "Protagonistas de la música", se quedó durmiendo en otro lado, ya que estaba literalmente con sus "neuronas agotadas".

Los músicos eran muy simpáticos y cultos. Hablamos durante horas de política y sexo, riéndonos bajo el mágico influjo de esta bebida de Tennessee. El equipo de música pasaba de los Fiskales a De Kiruza y después que la botella escupió su última gota, decidimos salir al Festival Ska en la Ex Cárcel.

Antes de llegar al antiguo recinto penitenciario, se nos ocurrió hacer una vaca y volver a entrar al supermercado, para salir con el segundo bourbon de la noche, una bolsa de hielo y vasos plásticos de cumpleaños infantil.

El Festival Ska estaba lleno de punketas con sus pelos de colores y sus ropas de cuero y blue jeans. Para variar, llegamos atrasados, cuando los Fiskales Ad Hoc ya habían tocado. De todas maneras hablamos unos segundos con Alvarito España, quien atendía a varios adolescentes, que con un estúpido rostro miraban a su ídolo musical.

Los integrantes de Zurdaka querían más fiesta. Feliciano, el "chico famoso", ya se había adosado al grupo y era ultra buena onda, alejado de todo estereotipo televisivo o rockero.

Los llevé al Cinzano, ya que querían escuchar a los músicos porteños, y pedimos sólo dos botellas de vino. El presupuesto, a esa hora de la noche, estaba bastante escuálido.

Como es la tradición, el cantante Manuel Fuentealba actuaba con todas las pilas puestas. Se acercó a nuestra mesa y cual santo católico besaba a todos en las manos y en la frente. Feliciano, junto a todo el grupo, entonaba el tango "Volver" y la gente pedía más y más temas.

Carmen Corena, ya bastante cansada, entonó el Chipi Chipi y por primera vez pude bailarlo con mi socia capitalina, mientras pensaba que si llego a tener otro hijo le pondré Jack Daniels. ¿No será mucho?



ajenjoverde@hotmail.com

1 comentario:

Anónimo dijo...

El nombre es wiskey, lo que es bourbon destilado en teenessey diferente a todo del escoces y/o ingles.
-sale en la etiqueta-